¿Qué es la vitrectomía?

La vitrectomía es un tipo de cirugía ocular para el tratamiento de enfermedades de la retina y del vítreo. La retina es un tejido sensible a la luz situado en la parte posterior del ojo. El vítreo es la sustancia transparente y gelatinosa que rellena el ojo.

Una vitrectomía consiste en extraer el humor vítreo y sustituirlo, habitualmente, por una solución salina o por una burbuja de gas, aire o aceite de silicona. En el caso que el humor vítreo sea reemplazado por gas o por silicona, puede ser necesario que el paciente permanezca en posición boca abajo o de lado durante unos días en la recuperación postoperatoria. Además, en caso que el interior del ojo se rellene con gas o aire, no se podrá volar en avión o subir a una altura superior a 500 metros sobre el nivel del mar hasta que la burbuja haya desaparecido, ya que los cambios de altitud pueden afectarla.

¿Cuándo es necesaria una vitrectomía?

El oftalmólogo puede considerar necesaria la realización de una vitrectomía como tratamiento frente algunos casos de las siguientes enfermedades oculares:

¿De qué manera puede mejorar la visión una vitrectomía?

A menudo, la vitrectomía puede mejorar o estabilizar la visión. La operación elimina cualquier hemorragia o resto (de una infección o inflamación) que pueda bloquear o enturbiar el paso de la luz al enfocarse en la retina. Además, también permite eliminar los tejidos cicatriciales que pueden desplazar, arrugar o desgarrar la retina.

Esta intervención también puede ayudar a eliminar un objeto extraño que haya permanecido en el interior del ojo debido a un traumatismo perforante y que, de no ser retirado, podría dañar la visión.

Antes de la intervención

El oftalmólogo puede recomendar la realización de una ecografía ocular, una tomografía de coherencia óptica (OCT) u otras pruebas para examinar el ojo.

¿Qué sucede durante la vitrectomía?

La vitrectomía se realiza normalmente en una cirugía ambulatoria con una duración de entre media hora y varias horas y bajo anestesia local o general para dormir el ojo.

Durante la cirugía, el oftalmólogo realiza tres pequeños cortes o incisiones inferiores a 1 milímetro en la capa blanca del ojo, la esclera con el uso de un microscopio para ver el interior del ojo. El cirujano utilizará instrumental quirúrgico de pequeño calibre para realizar uno o varios de los siguientes pasos:

  • eliminar el humor vítreo opacificado
  • retirar tejido cicatricial de la retina
  • eliminar cualquier objeto que no debiera estar en el ojo
  • reposicionar la retina en su lugar adecuado en la parte posterior del ojo
  • utilizar un láser para reparar desgarros en la retina
  • colocar una burbuja de gas o aire en el ojo para ayudar a que la retina permanezca en su lugar adecuado (la burbuja de gas desaparece más adelante por sí sola)
  • colocar una burbuja de aceite de silicona en el ojo (el aceite se elimina en una segunda intervención)

Después de la intervención

El oftalmólogo le prescribirá fármacos para aliviar el dolor y gotas que deberán administrarse durante varias semanas y le indicará cuando puede retomar su vida habitual.

Riesgos de la intervención

Como cualquier cirugía, existen algunos riesgos, aunque son menores que los beneficios previstos para la visión.

Algunos de los riesgos de la intervención incluyen hemorragias, desprendimiento de retina, presión intraocular elevada o infecciones.

Contenido médico revisado por - Última revisión 24/07/2024

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